La elaboración de una maqueta a escala, es sin ninguna duda vital para poder desarrollar al completo la pieza definitiva a su tamaño real. Desde una maqueta, no solo podemos indagar más a fondo sobre el resultado volumétrico, en las tres dimensiones que puede llegar a otorgar la escultura en cuestión y poder resolver de paso, cualquier problemática estética que no se apreciaba en los dibujos previos, si no también, será la huella perfecta para poder sacar todo tipo de medidas que ampliadas a escala, podamos realizar la copia al tamaño real en el que va a ser definitivamente creada la obra.

        En este caso, la maqueta se ha realizado en escayola, mediante el empleo con alginato de dos moldes directamente sobre las manos utilizadas como modelo base. Después, una vez cortada la maqueta en los 11 módulos de los que consta, se sacará todo el plantillaje en aglomerado exacto de todas las caras planas, para ampliar a tamaño real, lo que será la estructura interna o amazón, sobre el cual se realizará todo el trabajo posterior de modelado.